La formación de
nuestro sistema solar empezó hace unos 4600 millones de años aproximadamente,
pero eso no significa que nuestros planetas existiesen. Todo empezó desde
nuestro sol que se formó a partir de una nebulosa en el espacio donde la
gravedad atrajo y agrupó parte de la nebulosa hasta que estuvo tan apretada y a
una temperatura tan elevada que comenzaron a producirse reacciones
nucleares. En esta parte la nebulosa comenzó a brillar y se
convirtió en el Sol, en el centro de nuestro sistema solar. Mientras tanto en
otros lugares de la nebulosa, la gravedad atrajo y reunió polvo y gases hasta
formar espirales que giraban y crecieron convirtiéndose en trozos gigantes de
roca llamados proyectos de planetas donde
estos se unieron para formar los planetas.
La nebulosa de Oort.
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